si una Mujer te Rechaza y te hace Daño

Por muy mal que te hayan rechazado, no permitas que se meta en tu realidad. No hay razón para sentirse mal. Recuerda, tus deseos varoniles son completamente naturales y normales. Un hombre alfa nunca se siente avergonzado por sus grandes deseos sexuales. En su lugar, el se siente orgulloso de tenerlos.

Sé que algunos rechazos pueden ser dolorosos. Anteriormente he tenido rechazos malísimos de las mujeres. Una pava me gritó, “¡Fuera!” antes de que incluso hubiera dicho mi primera frase.

Otra vez una mujer tuvo algún tío para intentar que comenzara una pelea conmigo porque tan solo intente hablar con ella. Logré irme lejos sin llegar a los puños con el tío, pero me sentí completamente como un tonto después.

No hay nada que puedas hacer sobre el rechazo. Si sales a la calle a hablar con mujeres, te pasarán. Pero casi todas las veces, como he explicado, son motivo de celebración.

Pero en esos casos donde el rechazo es tan atroz que arde tu corazón, lo mejor que se puede hacer es permitir a la memoria que haga desaparecer ese rechazo.
Eso es lo que yo hago, y me funciona. De hecho, probablemente haya sido rechazado de forma mucho peor que los dos ejemplos que he dado, pero los recuerdos de ellos están literalmente borrados de mi mente. Te explicaré como puedes hacer este ejercicio.

Aprendí este ejercicio borrador-memoria de Tony Robbins, y está basado en la visualización mental de los principios de la Programación Neuro Lingüística, una forma de hipnosis. Esto es lo que tienes que hacer.

1. Forma una imagen en tu mente de un rechazo horrible.
2. Haz la imagen tan grande como sea y tráela cercana a ti. Siente el calor del rechazo. Hazlo intenso.
3. Ahora comienza a mover la imagen lejos de ti.
4. Mientras la estás moviendo lejos, hazla en blanco y negro.
5. Mantente moviéndola hasta que este tan lejos que sea una pizca diminuta.
6. Ahora observa que la imagen diminuta en blanco y negro comienza a palpitar con música de circo.
7. Mientras la diminuta y lejana imagen se mueve con el ritmo de las melodías de carnaval, muévela ahora tan lejos que arda en el sol.
No es grande el recuerdo, pero si es grande el ideal ¿es esto?